El mundo sigue conmocionado por la noticia de la muerte de Robin Williams, un grandísimo actor que con sus ya míticas interpretaciones logró hacer reír y llorar a partes iguales y demostró así su innato talento para hacerse un hueco en la vida de las personas, aunque fuera a través de una pantalla. A continuación hacemos un recopilatorio de sus mejores momentos, no sólo como actor sino también como persona.

El papel que lanzó a la fama a Robin Williams fue en televisión, como actor invitado en un episodio de ‘Happy Days’. Su actuación fue tan bien recibida que consiguió su propio spin-off, llamado ‘Mork & Mindy’, que le llevó a ganar un Globo de Oro en 1979 y una nominación en los Emmy.

La etapa de oro de Williams, pero, empezó con la película ‘Good Morning, Vietnam’ (Barry Levinson, 1987), una comedia sobre la guerra que le concedió otro Globo de Oro y su primera nominación al Oscar.

Después de haberse labrado un nombre como cómico, su primera incursión en el drama vino de la mano del film ‘Dead Poets Society’ (Peter Weir, 1989), que sobra decir que fue un éxito personal acaparador y a día de hoy sigue siendo una de sus interpretaciones más representativas. La frase “O Captain! My Captain!”  ha sido de las más usadas para brindarle homenaje en estas últimas horas desde que se ha conocido la noticia de su muerte.

Robin Williams dejó también su inconfundible huella en el cine de animación, poniendo voz al legendario Genio de ‘Aladdin’ (Ron Clements y John Musker, 1992). Precisamente ha sido este papel el que ha inspirado a La Academia en su emotivo tweet de despedida a Williams:  



Otro papel cómico de Williams que no hay persona que no conozca es el de Mrs. Euphegenia Doubtfire en la película ‘Mrs. Doubtfire’ (Chris Columbus, 1993). Su magnífica interpretación de dos personajes a la vez, cambiando acentos, gestos y género durante toda la película, convirtió en un éxito de taquilla a esta comedia que ese año consiguió rivalizar en las salas con ‘Jurassic Park’ (Steven Spielberg, 1993).

Robin Williams participó en muchas otras reconocidas cintas después de su gran éxito en ‘Mrs. Doubtfire’, como ‘Hook’ (Steven Spielberg, 1991), ‘Jumanji’ (Joe Johnston, 1995), ‘The Birdcage’ (Mike Nichols, 1996), ‘Flubber’ (Les Mayfield, 1997) o la más reciente ‘Night at the Museum’ (Shawn Levy, 2006), que se convirtió en una trilogía de la que aún está pendiente la tercera parte, que llegará a los cines este diciembre y que Williams acabó de filmar en mayo. Además de comedias y películas familiares, pero, uno de sus papeles más llamativos y únicos fue el de Sy Parrish en ‘One Hour Photo’ (Mark Romanek, 2002), un aclamado thriller psicológico que le apartó completamente de las fronteras impuestas por los personajes habituales en su carrera y le ayudó a demostrar su versatilidad interpretativa.

El papel que finalmente le concedió el Oscar, pero, fue el de Dr. Sean Maguire en ‘Good Will Hunting’ (Gus Van Sant, 1997), escrita por los en aquel momento desconocidos Ben Affleck y Matt Damon, que también se llevaron el Oscar a Mejor Guión Original. La escena en la que el personaje de Williams da un discurso en un banco del Boston Public Garden es probablemente la más famosa de su carrera y una de las más históricas del cine.

Robin Williams tuvo también muchos momentos memorables fuera de sus personajes y películas, entre los que destacan su monólogo en el evento ‘An Evening with Robin Williams’ que se hizo en San Francisco en 1982, su aparición en ‘Saturday Night Live’ como Ronald Reagan en 1986 o su entrevista en ‘Inside the Actors Studio’ en 2001.  Su sentido del humor y simpatía le convirtieron en uno de los artistas más queridos e idolatrados de Hollywood, y eso ha quedado más que demostrado con todos los mensajes de luto que le han dedicado durante la noche de ayer y el día de hoy las estrellas más famosas del mundo del cine.



Gran actor y gran persona, faltan palabras para decir lo mucho que echaremos de menos a Robin Williams. En palabras de La Academia, “Genie, you’re free.